May 19, 2010

Un nuevo dia


Mayo 2010
Monterrey, México

La noche se ha escapado en un abrir y cerrar de ojos, el tiempo se alargó tortuosamente y en un segundo todo desapareció. La luz se abre camino entre nubes color pastel, un nuevo dia está por nacer. Una llovizna fria recorre mi cuerpo, del cielo caen gotas muy finas y baña mi mundo. Lluvia, una lluvia infinita como la noche que acaba de pasar. Brota del fondo de un espíritu, en su cántaro de barro, derramada sobre todos nosotros. Parece como si yo fuera el único en este planeta deshabitado que puede sentir la lluvia caer. Gota tras gota, minuto tras minuto. Las nubes se cierran ante mi, pero la luz del Sol comienza a clarear en el dia llenando de calor mi espíritu. A decir verdad me gusta la lluvia. Tras mi ventana, me gusta ver la fina capa húmeda de las plantas, el pavimento mojado, el olor a tierra mojada, cuantos recuerdos de otros tiempos me trae el olor a lluvia!, a tierra mojada! Una de mis patrias, donde siento que pertenezco, y ya no tengo. Muy lejanos recuerdos vienen a mi memoria. Uno de tantos lugares que he pisado y uno de tantos que he añorado. Pero así somos, no queremos lo que tenemos, y añoramos lo que perdemos y nunca llegamos a valorar. Una corriente de aire azul llena el cuarto, el grisáceo se desvanece y la visión vuelve, un mundo azul claro, contrastado con el grisáceo que dejo atrás una noche fria y larga. Un azul triste, y a la vez tan feliz, un verde vida y un verde muerte. Enmarcado por un blanco casi celestial, vacio al fin, casi mágico. Colores. Los colores emergen uno a uno al pasar el dia. La ventana me recuerda que el combate ha comenzado de nuevo, la sangre se derramará y cobrará un sentido para toda una vida. La cierro y me preparo para la batalla. Hoy es un dia nuevo. Hoy es otro dia. Posibilidades infinitas dependen de mi. Librar la batalla. Una batalla sin fin.

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